Literatura gótica y ciencia ficción
Una entrevista al escritor de lo
macabro Diego Arandojo extraído en LAK-BERNA REVISTA DE ARTE
1) ¿Qué es la literatura Oscura?
Ante todo definamos “oscuridad”. Se trata del vacío, de la ausencia,
de la nada, de la cerrazón y de la nulidad. Es un espacio carente de sentido,
una especie de sueño eterno de donde emergen las formas. Para los astrofísicos
la materia oscura (de donde probablemente surgió el universo) ocupa el 80% del
total de materia presente en todo el cosmos. Tan solo el 20% de ella es luz.
Por tanto, creo que se trata de una guerra ganada de antemano. Un conflicto
efímero entre iluminación y oscuridad. Hablamos, entonces, de oscuridad y de
algo que se esconde en el corazón de los hombres. Ese algo respira y camina por nuestros sentidos,
hace de la piel su hogar. La literatura oscura (muy distinto al concepto de oscurantismo medieval, previo al iluminismo)
se propuso colocar todos estos elementos dentro de la estructura de acción
dramática, generando grandes obras maestras. Allí el mal pernocta utilizando al
bien como sábana de sus propósitos.
2) ¿Por qué elegís la literatura
Oscura o la Ciencia
Ficción? (cuáles fueron tus influencias)
La elección se dio naturalmente por la formación cinematográfica que
tuve de niño. Iba a ver películas solo, en general los fines de semana. Me la
pasaba metido en la sala y si el filme era de mi agrado, volvía a verlo. Me
sucedió de ver en continuado cuatro veces la misma obra. Por tanto no podría
definir tal o cual autor o director como influencias. Sí podría afirmar que
hubo etapas. Spielberg de niño, un David Lynch de adolescente y un Kieslowski
de adulto, o ninguno de ellos. Lo que siempre me influenció y estimuló fueron
historias en donde la fantasía se mezclara con la realidad, el anhelo que todo
niño lleva en su corazón. La imaginación al mando.
3) ¿Encontrás movimientos Oscuros o
Ciencia Ficción en la
Argentina?
Sí, los hay, aunque podría decir que muchos están relacionados más
que nada con grupos musicales de fuerte tendencia esotérica, como Nightwish, o
Therion, o Moonspell, dentro del género neo-gótico o classic metal. La
ciencia-ficción es más complicada porque el mundo anglosajón la concibió y
estamos inundados de ella hace decenas de años. Juan-Jacobo Bajarlía, Angélica
Gorodischer, Bioy Casares, son algunos de los ejemplos de una narrativa
fantástica argentina que permanecerá y propagará en los libros que vendrán.
Existen también movimientos oscuros más rayanos con lo gótico, pero –como mencioné al
inicio de tu pregunta- también están ligados a experiencias musicales como
Marylin Mason o Evanescence. Comparten, efectivamente, una raíz oscura que
intenta hallar su lugar en una era de muerte y guerras con enemigos invisibles.
4) ¿Cómo fue la experiencia de
publicar tu primer libro? ¿Y como la recibieron otros escritores?
Bastante oscura, precisamente. La edición del libro se realizó
gracias a mi fallecido amigo catalán Flavio Alonso de Celis. Con él veníamos
hace años barajando la idea de publicar algo en conjunto. Primero surgió la
idea de una obra titulada La
cena de las hidras deshidratadas. Escribimos algunos capítulos, pero la
historia se fue a pique por complicaciones laborales de ambos. Luego, y con el
paso de un año aproximadamente, le comenté a Flavio la posibilidad de viajar a
Barcelona para visitarlo, ya que manteníamos amistad telefónica y por correo
electrónico a diario. Él se puso muy contento, pero ese sentimiento duró muy
poco. Se me cayeron algunos trabajos que iban a solventar el costo del viaje, y
le dije a Flavio que no podría ir a conocerlo. Fue así como él propuso editar
un libro encargándose de los costos de la edición, y de esta manera conocernos
aquí en Buenos Aires. Ese fue el nacimiento de Cuentos macabros para sonámbulos.
Un tiempo después y en plena actividad de pre-prensa del libro, recibí la
noticia de que Flavio había muerto. Fue un momento terrible. Dudé en seguir con
la edición, pero después me puse a pensar en lo que diría mi amigo, y fue así
como Cuentos Macabros… se transformó en un testamento
literario. Tenía que concentrarme, continuar con la labor y de esta manera todo
llegó a buenos términos.
En referencia a cómo lo vieron otros escritores, realmente envié
ejemplares a muchos medios, pero el libro fue ignorado sucesivamente editor
tras editor. Sé que es una obra compleja, con lenguaje rico en giros
idiomáticos castellanos y rioplatenses, pero vale la pena echarle el ojo. El
arte de tapa y contratapa, sumándole las ilustraciones internas, realizado por
Luciano Cruzado (alias Mr. Lec) es brillante, y aunque barroca la obra en su
conjunto, es un llamado a la
Oscuridad en primer término.
5) ¿Creés en literatura Oscura o
Ciencia Ficción masivo en los libros como en medio Audio Visuales?
Es un poco relativo y dudoso decir que una u otra vertiente, o
medio, ha acogido con más fuerza a la literatura oscura o de ciencia-ficción. El
cine le ha dado aire, popularidad a muchas obras que –de no ser así- hubieran
quedado en un anaquel de una biblioteca, olvidadas por el mundo. Pero tampoco
hay que olvidarse del comic. Por ejemplo: Constantine,
una pieza de arte de la historieta anglosajona, aunque defenestrada por la
crítica, que fue llevada al cine. El personaje de John Constantine que media
entre infierno y cielo fue gestado en los ’80, en un mundo que necesitaba un
mediador entre Occidente y Oriente, un mundo que iba perdiendo su sentido, sus
símbolos. Con la llegada de la ramificación de Vértigo de la editorial norteamericana DC
(Detective Comics) se crea el campo necesario para contar otra clase de
historias. Surge así Sandman de Neil Gaiman, obra maestra de la
narrativa gráfica internacional. Aquí el señor de los sueños, Morfeo, debe
regresar a su puesto luego de ser encarcelado por un humano que quería capturar
a la Muerte,
para obtener la inmortalidad.
6) ¿Ves como futuro la literatura
de Ciencia Ficción y Oscura en la
Argentina?
Yo creo que bien. Hay mucha gente volcada a estos géneros, y hay que
tener en cuenta que lo principal es liberar la imaginación de las ataduras
socioeconómicas, o socioculturales. Nos han dictaminado que la sombra, o la
oscuridad, es maldita y que la luz es bendita. Tal vez en algún sentido sea
veraz, pero toda luz quema y toda sombra apaña. Le mejor es conocer a ambas
para rescatar de ellas la Verdadera Oscuridad, que se halla en el fondo del
universo, en una larga pesadilla de donde hemos surgido hace decenas de
millones de años, y a donde volveremos, más pronto de lo que suponemos.
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